Intérprete de cante flamenco. Su tío Francisco Ortega El Fillo le inició en el cante, donde destacó sobre todo como intérprete de siguiriyas. Se conservan tres versiones suyas de este cante y alguna muestra de toná cantada por él. Hacia 1875 le fue concedida en Sevilla la primera «Llave de oro» del cante
(Melfi, 1868 - Roma, 1953) Político y economista italiano. Se licenció en la Universidad de Nápoles y se dedicó al periodismo y a la docencia; en 1898 fue profesor de Ciencias Económicas en la misma universidad. Sus primeros estudios contribuyeron de forma esencial a definir la cuestión del Sur, que examinó desde el punto de vista de la distribución de la renta del Estado, como por ejemplo en Il bilancio dello Stato dal 1862 al 1896-1897 (1900), y sobre todo en Norte y Sur (1902), en la que se destruía el mito del parasitismo meridional.
Otros estudios de aquellos años trataron el tema de la distribución de la riqueza privada (La ricchezza dell´Italia, 1904) y de la energía hidroeléctrica, vista como instrumento indispensable para la industrialización del Sur (Le forze idrauliche d´Italia e la loro utilizzazione, 1906). Cabe destacar su trabajo El socialismo católico. Fue diputado radical (1904), ministro de Industria en el gobierno de Giolitti (1911-1914), ministro del Tesoro en el gobierno de Orlando (1917-1919) y presidente del Consejo desde 1919 hasta junio de 1920. Algunas de sus actuaciones, como un proyecto de ley para la amnistía de los desertores y un esbozo del proyecto de acuerdo con Yugoslavia, junto con su fama de hombre de izquierdas, le valieron la animadversión de la derecha. Su ministerio, ya problemático a causa de la difícil situación del orden público, tuvo que afrontar además la cuestión de Fiume.
En 1920 se retiró, abriendo el camino hacia el último gabinete de Giolitti. Tenía una aguda inteligencia y un temperamento muy realista, y no se hacía ilusiones respecto a la situación europea resultante de los tratados de paz (escribió, durante aquellos años L´Europa senza pace, 1921 y La decadenza dell´Europa, 1926). Sin embargo no era lo bastante escéptico como para no darse cuenta del significado del fascismo, contra el cual se manifestó con la máxima dureza, al contrario que otros muchos políticos de pensamiento demócrata o liberal.
Tuvo que exiliarse en 1924, y contribuyó desde el extranjero a las campañas antifascistas (destacan, en francés, La demócratie, 1933 y La désagrégation de l´Europe, 1938). En 1943 fue arrestado por la Gestapo y deportado, y en el campo de prisioneros escribió el memorial Rivelazioni. Dramatis Personae, publicado en 1948. Su comportamiento político en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial fue menos lineal: se adhirió en ocasiones a los bloques de orden y de reconciliación, pero en otras persiguió el ideal político de un compromiso común de todas las izquierdas democráticas, dentro de una perspectiva europea, mucho más afín a su carácter